La moda sostenible es cada vez más demandada, gracias a que se va haciendo más visible el funcionamiento de la industria de la moda convencional
Nos hemos acostumbrado a encontrar fácilmente una gran variedad de ropa a muy bajo precio. Pero no sabemos nada de cómo se ha confeccionado esa prenda.
La confección de la ropa convencional pasa en su mayoría por la deslocalización, condiciones de trabajo miserables y contaminación ambiental.
Pero hay una buena noticia. Existen alternativas. Existe la moda sostenible.
Dale al play y descubre cómo puedes hacer un impacto más positivo en el mundo con tu consumo de ropa sostenible:
¿Qué cuesta producir una prenda de ropa convencional?
Hoy en día puedes conseguir fácilmente ropa barata o a un precio muy asequible.
En la mayoría de ocasiones, ese precio no se corresponde con el coste real de la prenda.
Para producir cualquier prenda de ropa convencional se necesitan:
- Muchos litros de agua: del orden de 2900L para una camiseta de algodón básica (contando con el cultivo del algodón, teñido, lavado, etc.). Cerca de un 30% del agua total utilizada queda contaminada.
- Pesticidas para las grandes extensiones de algodón.
- Detergentes químicos y blanqueantes para el lavado del algodón.
- Tintes y suavizantes.
- Salud y calidad de vida de las personas que confeccionan la ropa.
Además de emisiones de CO2 durante la producción y transporte.
Los químicos usados para el tratamiento de los tejidos son muchos, y de reconocida toxicidad para la salud personal y del medio ambiente, como el cromo, ftalatos, antimonio, etc.
En el programa de Salvados dedicado a la producción de ropa en el mundo, Jordi Évole entrevistó a María Almazán, conocedora de primera mano de las fábricas de ropa en Asia donde se confecciona la mayoría de la ropa que compramos.
Me impactaron mucho sus palabras: «he visto ríos de pueblos del color de moda de la temporada del vaquero en occidente».
Sin palabras.
Además, como vimos con el bisfenol A cuando hablamos de las botellas de plástico, muchos de estos químicos actúan como disruptores endocrinos y se asocian a enfermedades reproductivas, algunos tipos de cáncer, etc. Además de problemas de salud como alergias o la sensibilidad química múltiple.
Salud y condiciones de vida del productor
En el vídeo sobre consumo responsable, contaba que la mayoría de las empresas de ropa han movido sus fábricas a países donde las leyes laborales y medioambientales son escasas.
Así, estas empresas pueden tener un coste de producción muy por debajo de lo que supondría confeccionar la misma prenda respetando el medio ambiente y a las personas que trabajan.
Beneficio económico como único objetivo.
Las personas (en su mayoría mujeres) que confeccionan nuestra ropa:
- Trabajan en condiciones de semiesclavitud,
- Con jornadas de entre 14 y 20 horas
- Con sueldos muy por debajo al mínimo para subsistir en sus propios países,
- Con nulas o escasas medidas de seguridad. Muchos son los accidentes mortales que se producen en estas fábricas. Recuerdo especialmente el derrumbe en 2013 de una fábrica en Bangladesh, donde murieron más de 1100 personas.
- Trabajo infantil.
Setem, dentro de su campaña Ropa Limpia, ha creado esta infografía para conocer de forma gráfica quién se lleva el dinero de la producción de la ropa convencional.
¿Qué puedo hacer yo?
Puedes hacer un consumo responsable de ropa.
Con la moda sostenible evitas favorecer esta industria que hace tanto daño al planeta y a las personas. Apoyas un tipo de economía que potencia el equilibrio social, medioambiental y económico. ¡Esto sí que es un voto útil!
No busques encontrar la ropa «perfectamente sostenible».
Ya sabes todo lo que implica a nivel social y ambiental la industria de la moda.
Ahora puedes elegir reducir ese impacto en la medida que quieras y te sientas a gusto.
No todo es blanco o negro. Busca el matiz de gris que te viene bien a ti en este momento. Quizá más adelante quieres cambiar de matiz e ir un poco más allá.
Tú decides lo que es coherente para ti. Entendiendo por coherencia lo que dice Jorge Lomar de que «si hay juicio no es amor».
Algunos criterios que puedes usar a la hora de elegir tu ropa:
- Que se hayan respetado los derechos humanos en su fabricación: que tengan el sello de comercio justo o bien que en la etiqueta «made in» figure un país (europeo si estás en Europa) donde puedes tener más garantía de condiciones laborales dignas. También la confección artesana local puede ser una opción.
- Que las materias primas sean sostenibles (algodón, lino y cáñamo orgánicos, seda paz, tela reciclada, …).
En Gansos Salvajes recomiendan, además, que la tela no sea mezcla de natural y sintético, ya que es más difícil de reciclar y degradar. - Que el diseño, fabricación y/o venta sea lo más cercano a donde vives: esto da más garantías de unas mejores condiciones laborales, como dije anteriormente, y también un fomento de la economía local.
Cuando hablo de local no me refiero a una sucursal de una multinacional que haya cerca de donde vives. Me refiero a esas empresas cuyo capital es de tu ciudad, región o país.
Por supuesto, además de comprar:
- Plantéate la posibilidad de modificar o reutilizar una prenda de ropa que ya tienes y que podrías darle otro uso o que se ajustara mejor a tus gustos de ahora.
- Intercambia ropa con familia y amigos.
- Compra ropa de segunda mano. Aquí he de reconocer que me cuesta. No porque tenga algún tipo de reparo, sino porque nunca me parece que haya algo «potable» para ponerme (al menos en las tiendas que he ido).
- Y sobretodo, intenta sacar partido a la ropa que tienes. Prioriza nuevas combinaciones antes que adquirir nuevas prendas.
¿Dónde encuentro moda sostenible?
Cada vez hay más oferta diseñadores y marcas que trabajan bajo los criterios de la moda sostenible.
Si donde vives tienes más o menos oferta ¡Enhorabuena! Lo tienes un poco más fácil.
Si no es así, como en mi caso, te cuento algunas ideas que yo hago para conseguir ropa más sostenible:
Tiendas pequeñas
Una idea es comprar en pequeñas tiendas o boutiques. Suelen tener ropa de más calidad y de marcas canarias, españolas y europeas (éstas son las procedencias más locales para mí que vivo en Gran Canaria).
Mira las etiquetas, pregunta al dependiente de la tienda dónde fue fabricada la prenda.
No creas que es algo extravagante. Yo lo hago, y a las personas responsables de la tienda les suele gustar que me interese por su ropa y me dan información sobre los diseñadores o marcas. Te sorprenderás de las historias que hay detrás de una simple prenda de ropa, y de las cosas tan lindas (por dentro y por fuera) que hacen las personas y su creatividad.
Ferias de artesanía
En las ferias de artesanía siempre suele haber algún artesano que confecciona ropa con materiales naturales o reciclados, realiza decoraciones en telas, etc. Aprovecha las ferias. Puedes encontrar creaciones exclusivas hechas por algún paisano tuyo artesano.
Tiendas online
Por supuesto, tenemos las tecnología que nos permite acercar lo que estaba en la distancia.
Hay varias tiendas online de moda sostenible, pero hay que tener un poco de paciencia par ir encontrando las que son de tu estilo.
Si lo prefieres, en mis servicios comparto con mis clientes una página que mantengo actualizada con las tiendas de ropa y zapatos donde compro o suelo buscar cuando necesito algo.
Y tú ¿cómo lo haces para vestir más sostenible? ¿Me lo cuentas en los comentarios?