De vez en cuando veo empresas que fabrican ropa a partir de plástico reciclado: el famoso y omnipresente poliéster fabricado a partir de botellas PET.
Suena bien.
Está bien visto en nuestra cultura actual lo de reciclar. Son temas que hasta salen en la tele.
El caso es que yo aquí veo 2 asuntos que no me terminan de encajar.
- Seguimos poniendo el foco en el reciclaje, como si fuera una solución al plástico, cuando debería ser el último recurso una vez que hemos agotado todas las fases anteriores. Las 5R de una vida sostenible que genera menos basura.
- ¿De verdad es una solución usar y tirar plástico y luego llevarlo pegado a la piel?
Que hasta hay ropa interior de poliéster…
Nicolás Olea, catedrático de la Universidad de Granada, lleva años advirtiendo de la contaminación a la que estamos expuestos por los componentes plásticos con los que convivimos a diario.
Se comportan como disruptores endocrinos.
Interfieren en nuestro sistema hormonal, siendo esto de especial riesgo en mujeres, niños y adolescentes.
A ver, que no pretendo meterte miedo.
Ni tampoco echar mierda sobre las empresas que intentan hacer algo más sostenible su producción.
Mi intención es compartir esta realidad, y cuestionar que no todas las soluciones que se nos venden son tan bonitas como parecen, aunque tengan muy buenas intenciones.
No digo que reutilizar plástico como ropa esté mal.
Puede que para alguna prenda esté justificado, tipo anorak impermeable, zapatillas deportivas o algo así.
Lo que cuestiono es que la solución al residuo plástico (ni a ninguna otra basura) es el reciclaje.
La solución a la basura es no generarla.
Sobretodo si el objeto que se produce ya está destinado a la basura desde su diseño (como los envases de cualquier producto).
¿Cómo hemos normalizado este sinsentido?
Pero sí, ya sé. Por mucho que cambies tus hábitos, y muchas personas también lo hagamos y procuremos no comprar envases plásticos, en el mundo se siguen fabricando y tirando a la basura ingentes cantidades de plástico.
¿Qué hacemos entonces con toda esa basura que ya existe y sigue creciendo?
Aunque ya hay algunas soluciones incipientes de biodegradación de plástico a base de microorganismos y algunos insectos, no hay de momento ninguna respuesta efectiva que se haya puesto en marcha.
No tengo la solución al problema del plástico en el mundo. ¡Sorpresa!
Pero sí sé que de reciclar el plástico no lo haría para transformarlo en ropa que va a estar en contacto con la piel, y añadir más contaminación al cuerpo de la que ya estamos expuestos.
¿Por qué querremos hacer eso?
Procura un consumo que genere menos basura, y mientras no resolvamos el problema del plástico, vamos a reciclar lo que hay en objetos preferiblemente reutilizables y que no supongan un contacto directo con nuestro organismo.
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